¡Hola Winelover! En esta nota decidimos irnos al “Extremo”, por eso te presentamos a uno de los productores responsables de elaborar algunos de los mejores vinos de altura de nuestro país. ¡Con ustedes, Agustín Lanús!
Es importante saber que sólo un puñado de enólogos del Valle Calchaquí elabora vinos en el límite de donde se pueden cultivar uvas. Estos viñedos están ubicados en lugares extremadamente aislados, lo que hace que el tiempo, los recursos y los costos de mantenimiento de los mismos sean un desafío, incluso para el enólogo más apasionado.
Sin embargo, la calidad superior de estos vinos justifica el esfuerzo, ya que las variaciones extremas de temperatura, los niveles más altos de radiación solar y el largo período de maduración dan como resultado vinos altamente concentrados y complejos.
Los compradores de vino más exigentes de todo el mundo descubren cada vez más las cualidades especiales de los vinos cultivados en altura. Los vinos de Agustín Lanús han estado y están disponibles en China, Reino Unido, Estados Unidos, Perú y, por supuesto, en los principales mercados de Argentina.
Hay que tener en cuenta que Agustín es un productor especializado, por ende, sus cosechas son limitadas.
Exploremos más sobre Agustín Lanús.
Este hombre es un apasionado por el vino y su cultura. Es Ingeniero Agrónomo, Sommelier y Magíster en Ciencias en Viticultura y Enología del programa Vinifera EuroMaster. Completó sus estudios en Montpellier y Burdeos (Francia) y en Asti (Italia).
En 2013, Agustín viajó por primera vez a la parte alta de los Valles Calchaquíes con el objetivo específico de aprender más sobre los micro-terruños únicos que se encuentran en altitudes extremas. Estos terruños, que van desde los 1.650 a los 3.100 metros sobre el nivel del mar, albergan algunos de los viñedos más altos del mundo.
Desde entonces ha elaborado vino, además de ayudar a desarrollar y gestionar viñedos, en las tres provincias que tocan el Valle: Salta, Tucumán y Catamarca.
Le complace llevar a cabo la exploración de métodos alternativos de elaboración de vino y de diferentes variedades, incluidas la Criolla, Cabernet Sauvignon, Tannat, Cabernet Franc y, por supuesto, Malbec.
Cafayate, en la provincia de Salta, es sede de Agustin Lanus Wines y Bad Brothers Wine Experience, su popular bar de vinos y restaurante.
Agustín no trabaja solo, tiene un socio con el que comprarte el amor por los caballos. Por lo que muchas de sus etiquetas tienen a este animal como insignia para reconocer sus productos. Ambos viven en Cafayate, Salta, por el amor al lugar y al vino. Agustín y el empresario internacional David Galland, quienes se conocieron mientras compartían su pasión por las cabalgatas de larga distancia en los Andes, decidieron formar una colaboración para elaborar vinos de calidad de los terroirs de altura del Valle Calchaquí.
Yyy, ¿a dónde se ubican esos viñedos extremos?
Resulta ilógico para cualquier productor intentar hacer viticultura en las alturas extremas donde se encuentran estos terruños. Manejar los diversos desafíos inherentes a la elaboración del vino a alturas extremas, es un obstáculo casi imposible de superar para todos, excepto para los más apasionados productores.
Según Agustín, “nosotros consideramos que cualquier viñedo ubicado por sobre los 2.200 m.s.n.m. es algo extremo. Explorando los diferentes vallecitos que componen el Valle Calchaquí, en lo alto de la montaña, encontramos increíbles microclimas que permiten que los viñedos existan en alturas entre los 1.700 y 2.750 m.s.n.m”.
Una curiosidad, la Bodega Móvil: Chasqui.
En época de vendimia, la Bodega móvil Chasqui comienza a rodar por los Valles Calchaquíes. Este proyecto no sólo busca producir vinos excepcionales respetando la uva y la naturaleza, sino también revitalizar las comunidades locales y sus familias, brindando oportunidades económicas y promoviendo el orgullo por las tradiciones vinícolas tradicionales.
Pero, ¿Qué significa Chasqui? Chasqui era el mensajero personal del Inca, utilizaba un sistema de postas para entregar mensajes u objetos. Era capaz de cubrir, en relevos, hasta 180 kilómetros diarios.
Cada chasqui llevaba dos objetos, un quipu y un pututu. El quipu se utilizaba para almacenar y transportar información a través de un sistema de cuerdas anudadas que representaban diferentes cosas basadas en el tipo, color, número de cuerdas, etc. El chasqui era capaz de leer, traducir y transferir la información sobre el quipus. Por su parte, el pututu era una caracola utilizada como trompeta. Se utilizaba para indicar a otros chasquis que un corredor estaba cerca, para que pudieran prepararse para correr y hacer el relevo.
Adaptado a los tiempos modernos, Agustín Lanús se convierte en el nuevo chasqui. A través de esta iniciativa innovadora, Agustín busca escribir un nuevo capítulo en la historia del vino del noroeste argentino, celebrando la conexión entre el pasado y el presente, la tradición y la innovación.
La innovación radica en que, en lugar de recoger las uvas y transportarlas por caminos difíciles hasta la bodega, Agustín ha decidido hacer el vino en el mismo lugar donde se cosechan. Para esto, lleva consigo todo el equipo necesario y el conocimiento para convertir las uvas en vino.
La “Sunaleta”, como también la llaman, se mantiene sobre un remolque para caballos. Así, Agustín realiza una gira de cosecha, pasando por Cachi, Seclantás, Luracatao, Angastaco y Cafayate. Durante su recorrido, visita a diversas familias, recuperando la tradición de despalillar las uvas y convertirlas en vino. Además, devuelve los restos del despalillado a la tierra para fertilizar el suelo.
En este viaje, lo acompaña su equipo de trabajo. También su familia.
Luego de cada cosecha Chasqui regresa a Cafayate, donde descargan el tanque y, al día siguiente, toma rumbo para otro pueblo. De esta forma va repitiendo el proceso en los viñedos de diversas familias. Como todo, también existen dificultades. Debido a que la capacidad del tanque tiene un límite, alguna vez debió transportar algunas cajas con uvas sin procesar. En Luracatao (Salta), por ejemplo, la uva tarda más en alcanzar el punto óptimo de maduración para su cosecha. Esta situación aumenta el riesgo de heladas.
Llevando a cabo todo este proceso se gana en logística, ya que el peso de la uva es el doble que el del vino elaborado, y se gana en frescura al momento de la elaboración, evitando horas de transporte de la uva bajo el sol.
Sus líneas de vino.
Bad Brothers, vinos de altura: tiene las etiquetas de Facón Selection en diferentes varietales, Premium Malbec, MaTaCa y ToVio.
Sunal, terruños de extrema altura: ¡Atención, mini dato! ¿Sabés qué significa Sunal? Lanús al revés. Aunque también, Agustín comenta que se puede tratar de una reversión entre Sol (sun) y Altura (al).
Esta línea incluye Ilógico Malbec, Ilógico Criolla, Salvaje Malbec Luracatao, Salvaje Malbec Cachi, Salvaje Malbec Pucará, entre otros.
Vinos especiales: En esta línea aparecen etiquetas de exportación, pero también la etiqueta de Aguayo, una colaboración entre Agustín y el enólogo chileno Stefano Gandolini. Fue el primer vino icónico elaborado en la provincia de Catamarca por la denominación Hualfín. Es un clásico vino con cuerpo proveniente de viñedos de más de 2.100 msnm.
Sumak Kawsay es otra etiqueta de un Malbec único elaborado en colaboración entre Agustín Lanús y la comunidad indígena Los Amaichas, de cuarenta pequeños viñedos familiares (de ¼ a 1 hectárea) en la provincia de Tucumán.
Nuevos lanzamientos del 2024.
Agustín sumó a su amplio porfolio las etiquetas de Sunal Exploración. Reflejando la búsqueda apasionada y continua por resguardar las cepas ancestrales y patrimoniales, creando vinos con identidad única.
Según el productor, su misión será siempre ¨ser guardianes de las Criollas¨, honrando el trabajo, los sueños y las tradiciones de cientos de años de las familias de los Valles.
La visión para las uvas Criollas es dar a conocer su prestigio ya que tienen potencialidad enológica, son exclusivas porque son autóctonas y porque tienen una historia que contar, de cultura, tradición y lugar. Si querés saber más sobre las Criollas, leé esta nota.
Sunal Exploración incluye etiquetas de la variedad Criolla Chica, de diversas regiones. Una Criolla Chica Blanca y tres Tintas (rosadas para la legislación).
Agustín cuenta: ¨Fueron muchos años recorriendo familias que en todos sus jardines tienen estas plantas patrimoniales, con interpretaciones y conducciones diversas de acuerdo a la familia. Yo le llamo viticultura ancestral¨.
¨Puntualmente a la Criolla Blanca la descubrí hace muchos años en los viñeditos de la familia López en el paraje Cuchi Pampa, Valle de Luracatao, plantas de 1906. Vi que eran muy distintas a la torrontés , con mucha pruina y racimos laxos grandes, peciolo bien verde y grueso; como la criolla chica pero blanca. La Criolla Chica Blanca es un vino de extrema altura hecho con un nuevo e increíble varietal¨.
¨Tiene un perfil aromático muy exótico y salvaje. Va más hacia los aromas tiolados como el Sauvignon Blanc, herbáceos, hoja de coca, pirazinas. Yo lo quise elaborar al método ancestral: desborres gruesos, sin filtrar y con leves burbujas naturales¨.
¨Las criollas harán historia en la vitivinicultura argentina, son nuestras y son parte de una identidad nacional que hay que revalorizar¨.
Lo he conocido a Agustín en el año 2022, en el evento Premium Tasting Buenos Aires. Luego, tuve la suerte de encontrarlo en varias ferias de vino hasta que, en uno de esos encuentros le regalé un sacacorcho de mi emprendimiento Criolla Wine. Buen regalo para que me recuerde y entremos en contacto. Participé también de su MasterClass en la escuela donde estudié la carrera de Sommelier Profesional.
Siempre bien predispuesto, de buen ánimo y contando su historia, la que iba plasmando paso a paso en el mundo del vino. Historia que lleva algunos años en el noroeste de nuestro país y seguramente le espera un gran futuro. Siempre fue muy claro, contando sus proyectos desde su fase inicial, aquellos que luego vemos que ha concretado con gran voluntad.
He aquí la gran historia del ¨Guardián de las Criollas¨, de esas historias y proyectos más inspiradores, que vamos conociendo en el camino y valen la pena contar.
¡Sumate a la experiencia Criolla Wine!
(Parte del texto fue rescatado de la fuente Guarda 14. También agradecemos a Agustín Lanús por las imágenes e información aportada).
¿Querés ver los vinos de Agustín Lanús en nuestra tienda? Hacé clic aquí.
