FEBRERO 16: DÍA INTERNACIONAL DEL SYRAH

Si hay una variedad de uva que ha dado largo debate e importantes investigaciones respecto de su origen, esa es la Syrah. Durante años se desarrollaron diversas teorías y se contaron diferentes historias. Se cree que fue llevada a Europa desde su nativo Oriente Medio, por los cruzados.

La Syrah es una de las uvas más antiguas, habiendo encontrado su desarrollo y fama en el norte del Ródano, Francia. Tiene su segundo hogar en Australia, conocida como Shiraz.

Siracusa en Sicilia (Italia), el Rhone en Francia y Shiraz en la antigua Persia son los tres puntos de donde se creía que provenía esta variedad.

Hermitage es el lugar del Syrah. Sobre su ladera aterrazada sobre el Ródano, las uvas Syrah, cultivadas por siglos, han dado origen a algunos de los vinos tintos más finos. En algunos casos, las etiquetas incluyen las denominaciones Ermitage, l’Ermitage o l’Hermitage.

El nombre de Hermitage deriva de la morada eremítica del cruzado Henri Gaspard de Sterimberg, que se retiró a la colina de Tain y fundó una ermita (Ermitage) para dedicarse a la oración y a la viticultura.

Rhone-Hermitage.

Zonas de cultivo en Argentina

Suele decirse que la uva Syrah es súper “plástica” porque se adapta a muchos tipos de clima, dando distintos perfiles de vino. Es una variedad que funciona muy bien en zonas calientes porque da origen a vinos con buen color y con mucho cuerpo. También en zonas más frías, ya que resultan vinos muy interesantes, con mayor grado de acidez.

La Syrah se ha difundido por todo el país, con muy buena adaptación en las regiones más cálidas, manteniendo un óptimo potencial en polifenoles* y aromas, aún con rendimientos elevados.

*Polifenoles: Compuestos orgánicos que le aportan al vino su color, su astringencia y su textura.

Se ha transformado en la variedad más destacada de la provincia de San Juan, sobretodo en la región del Valle de Tulum. También resultan muy interesantes aquellos vinos elaborados en Valle de Uco, Mendoza.

Características sensoriales

A la vista, los vinos de uva Syrah suelen ser de un color rojo purpúreo, con intensidad colorante media a media/alta. No suelen conservar ese color por tanto tiempo. Transcurridos unos años, suelen apreciarse más rojizos.


En la fase olfativa, son vinos expresivos y complejos. Suelen expresar un carácter especiado y animal. Por lo general las notas aromáticas que se destacan son: cuero, carne de caza, pimienta negra, regaliz, frutos secos, canela, laurel, clavo de olor, frambuesa, eucalipto.

Durante la crianza en madera, y su posterior añejamiento en botella, suelen aparecer aromas terrosos y notas de tabaco y humo.

En la fase gustativa, suelen ser vinos secos, con destacada acidez, robustos, con peso en boca, con notables e intensos taninos. Tanto éstos como la marcada acidez ayudan a una buena evolución en el tiempo.

En Criolla Wine seleccionamos opciones de Syrah admirables. Conocelas!

Maimará, Tilcara, Quebrada de Humahuaca, Jujuy. (Bodega Fernando Dupont).

Valle de Zonda, San Juan. (Bodega Xumek).

Vale la pena explorar esta cepa con mente abierta. Si bien el mundo del vino está lleno de buenos proyectos y desarrollos, los clásicos siguen siendo válidos y también abiertos a la exploración. Inspirate, descubrí y tomá buen vino. Sumate a la experiencia Criolla Wine!